Enfermedad Maldita
“ …. Todo
está oscuro. En silencio. Me cuesta caminar.
Tengo
miedo de andar, pues no sé a donde puedo llegar,
ni
con lo que en el camino me puedo encontrar.
Me
siento sola y te quiero llamar. Pero callo. Sé que algo me sigue.
Lo
presiento. Mi instinto me lo dice, pero no lo veo.
Grito
en mi mente tu nombre, no sé donde puedes estar.
Quiero
llegar hasta ti. Se que debo caminar adelante. Puede que te llegue a
encontrar.
Escucho
algo acercarse. Me asusto. Miro hacia atrás, pero la oscuridad me
impide ver.
Sé
que está muy cerca. Se escuchan unas cadenas arrastrar. Siento que
me va a atrapar.
El
pánico se apodera de mi. Nada me importa y comienzo a gritar.
Entonces
lo comprendo todo. Me despierto. Era esa horrible pesadilla que no
paro de soñar.
Pero
al despertar me doy cuenta de todo y me comienzo a relajar. Nunca
puedo encontrarte, porque a mi lado tú ya no estás. Sigo postrada
en esta cama por mi enfermedad, que cada día me impide más el
caminar. Esas cadenas que arrastro por la agonía de no poderte jamás
más amar. El dolor me envuelve en la oscuridad para otra vez a la
luz poder regresar. Un día acabará todo y La Muerte me atrapará.
Llegará la Paz Eterna y desearé entrar de nuevo a esta pesadilla y
volverla a soñar. En ella al menos tengo la esperanza de aunque a
ciegas y con esfuerzo, en algún momento te podré encontrar y al
menos esa mentira me hace olvidar lo enferma y sola que me suelo
encontrar “ .
EME82
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