Agua estancada para la ocasión.

Estancada. Sí. Pero limpia y pura.

Es medianoche en el bosque.

La luna llena besa el agua y se refleja en ella.

Es tan hermosa, poderosa y bella.

La hora ha llegado.

Cuerpos desnudos se sumergen en el agua gélida.

Romero tierno, flores de lavanda y pétalos de rosa, flotan sobre ella.

La felicidad en sus bocas. 

Rostros delicados como sus pieles.

Cabellos largos y sueltos.

Cánticos de antaño entonados en lenguas olvidadas.

La limpieza de la energía comenzó.

Cuerpos completamente sumergidos bajo el agua por segundos.

La luna llena los observa, protege, sana y purifica.

La hoguera les espera para secar suavemente sus pieles.

Los cánticos continúan y la fiesta prosigue.

La bondad reside ahora alrededor de su energía renovada.

El mal quedó en el agua y ya no volverá.

Aunque la negatividad y el mal siempre anda cerca,

ese mal, ya quedó atrás. 

Muy atrás.

Ya no existe más.

Corros alrededor de la hoguera, bailando felices y sin parar de cantar.

Secan sus cuerpos y continúan el ritual.

La noche los guarda y la luna llena es cómplice de su felicidad.

¡¡ Que La Verdad Prosiga Por Toda La Eternidad !!

EME82